En la década pasada, desde el Santiagueñazo y pasando por distintos levantamientos provinciales como el Cutralcazo en Neuquén -con la aparición de los fogoneros y piqueteros, que retomaron el tradicional método obrero de los piquetes de huelga pero en las rutas y calles, lugar donde la burguesía trató de inmovilizar y desclasar a los trabajadores desocupados- la resistencia a los planes "neoliberales" encontró la dura respuesta del Estado. Levantamientos como el de Gral. Mosconi en Salta, luchas obreras como en Tierra del Fuego, el 19/20 y Puente Pueyrredón en Buenos Aires fueron violentamente reprimidos por la policía y otras instituciones como la gendarmería: Teresa Rodríguez, Víctor Choque, Aníbal Verón, Maxi y Darío, entre muchos de los compañeros caídos son un emblema de la lucha en la Argentina, y a su vez demuestran como actúa el poder cuando los engaños de la democracia burguesa no alcanzan para parar la bronca.
En estos años, paralelamente, desde el poder judicial se ha puesto en marcha la otra vía represiva, no solo ordenando y legalizando las balas y los gases sino también encausando a los luchadores sociales, para lo cual y como el CeProDH lo denunció en el juicio a Raúl Castells, cuenta con diversidad de tipos penales acuñados en dictaduras pero también sancionados o no derogados en períodos constitucionales: en los últimos 20 años el Congreso ha mantenido delitos como coacción agravada que llevaron a la cárcel a quienes reclamaron por justas reivindicaciones.
Durante años, desde las organizaciones de derechos humanos, gremiales y estudiantiles combativas, de desocupados y la izquierda hemos levantado la libertad de todos los presos por luchar y el desprocesamiento de los luchadores que hoy llegarían a 3000. Entre los que se encuentran compañeros de los movimientos de desocupados, estudiantes combativos próximos a ser llevados a juicio, como Sergio Salgado y Martín Ogando, trabajadores de todo el país, o de fábricas ocupadas que sufrieron la represión como las trabajadoras de Brukman.
Hoy nos unimos con la CORREPI, Asoc. Ex Detenidos, la Aníbal Verón y otras organizaciones y compañeros en la exigencia de AMNISTIA YA para todos los luchadores encausados. El nuevo gobierno, que ha generado expectativas en los sectores populares al mostrarse como contracara del neoliberalismo y el menemismo diciendo que tomará medidas contra la pobreza, la desocupación y la corrupción, entre su profuso lenguaje ha incluido su oposición a la criminalización de la protesta social.
El CeProDH, que sólo confía en las propias fuerzas y en la lucha de la clase trabajadora y el pueblo como motor de transformación política y social, propone que esto se transforme en una amplia campaña, para lograr la amnistía para los compañeros. Como primera medida acordada con las otras organizaciones se realizó una conferencia de prensa este lunes 28/7 en la Liga y se concentrará en Plaza de Mayo el 30/7 a las 15.30 hs en Av de Mayo y Perú, donde se hará entrega del proyecto de ley de amnistía (que publicaremos en nuestra página web) en la Casa Rosada para que sea inmediatamente votado por el Congreso.