BASTA DE IMPUNIDAD

ABAJO EL CODIGO DE CONNIVENCIA

Acompañando a familiares y amigos, el CeProDH participó en la marcha que en el día de hoy se realizó desde Plaza Once a Plaza de Mayo, en la que se reclamó justicia por la tragedia del boliche Cromagñon y la renuncia de Aníbal Ibarra.

Desde hace meses, quienes gobiernan la ciudad de Buenos Aires, Ibarra, Macri y sus legisladores, nos mantienen inmersos en una campaña en la que prometen "terminar con todos los males" a través de la sanción del llamado "Código de Convivencia". Una vez más se demostró como un debate falso, solo dirigido a reprimir a la juventud y a aquellos que deben ganarse la vida con la venta ambulante. Es una cuestión más de "apariencia", una ciudad en que la pobreza no se vea, "presentable" para los turistas y los monopolios inversores. Pero con control social para que los jóvenes no se expresen.

"No tenemos control suficiente" dice ahora el gobierno. Mentira. Decenas de inspectores municipales recorren la ciudad controlando que "no se venda alcohol" (y cobrando las correspondientes coimas para poder hacerlo).

Pero ¿cuáles son los "problemas" de la ciudad?.

Esta tragedia demostró que a los que precisamente no se controla es a los que producen estas masacres, a los empresarios que se llenan los bolsillos lucrando porque lo que verdaderamente rige es un "Código de Connivencia", entre los funcionarios, los empresarios y la policía.

Esta es la seguridad de la República Blumberg. Persecución y muerte de gatillo fácil para los jóvenes, mucho discurso contra los pobres, mucha protección e IMPUNIDAD para la propiedad privada y las ganancias empresariales. El resultado está a la vista: casi 200 muertos y más de 700 heridos en una sola noche.

Por eso la primer medida que reclamamos es la renuncia inmediata de Aníbal Ibarra, jefe de gobierno de la ciudad.

Desde el CeProDH, llamamos a los organismos de derechos humanos a unificarnos en esta pelea: junto a los familiares y amigos conformemos una comisión investigadora independiente, con plenas atribuciones para llegar hasta el final, para que los responsables no queden impunes. No puede terminar esta causa como ocurrió en con las muertes de la mina de Río Turbio: están procesados los obreros que fueron víctimas de la tragedia.

Como con toda justicia se grita en las movilizaciones TODOS ellos LA TIENEN QUE PAGAR.

Marchemos este 6 de Enero