Viernes 6 de junio de 2008

Córdoba

Los primeros días del juicio al asesino Menéndez

Transcurridas ya cinco audiencias del Juicio contra Menéndez y otros siete represores que actuaron en el Centro Clandestino de Detención (CCD) La Perla-por el que pasaron más de 2.000 compañeros-, y en el que sólo se los está acusando por cuatro víctimas; ha quedado en evidencia lo acertado y necesario de la exigencia de que se los juzgue por CCD o circuito, así como por el delito de GENOCIDIO.

  • Imagen: Colectivo Indymedia Córdoba
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Córdoba, 05 de Junio de 2008

Transcurridas ya cinco audiencias del Juicio contra Menéndez y otros siete represores que actuaron en el Centro Clandestino de Detención (CCD) La Perla-por el que pasaron más de 2.000 compañeros-, y en el que sólo se los está acusando por cuatro víctimas; ha quedado en evidencia lo acertado y necesario de la exigencia de que se los juzgue por CCD o circuito, así como por el delito de GENOCIDIO.

Habiendo declarado ya tres testigos, es notorio el hostigamiento al que están siendo sometidos los mismos por parte de la defensa de los genocidas imputados, ante una actitud pasiva del Tribunal –integrado por un juez que viene desde la dictadura-que habilita el envalentonamiento por parte de los acusados.

En esta causa, los testigos no sólo están sometidos a prestar declaración delante de sus verdugos durante más de seis horas-teniendo que relatar una y otra vez el horror vivido-, siendo increpados a dar detalles de los mismos sino que, incluso, padecen amedrentamientos por parte de los genocidas y sus abogados. Merece ser destacado que uno de los defensores de los represores (Jorge Agüero) fue recientemente pre-candidato a gobernador de la Provincia, con una campaña de corte fascista, proclamando la libre portación de armas de los ciudadanos para la defensa contra la “delincuencia”. Ha sido este abogado uno de los que ha protagonizado mayores ofensas contra los testigos a lo largo de estas jornadas, intimándolos para que den nombres de otros secuestrados o revelen datos sobre su situación en aquellos años.

Otra expresión de estos agravios contra los testigos lo vimos en la última audiencia, donde uno de los testigos fue interrumpido en su desgarrador relato por uno de los acusados-Acosta- a quien se le permitió declarar en ese momento. Este genocida, en un intento de amedrentamiento y persecución brutal acusó de “infiltrado del Ejército” al testigo.

Esta situación se da en el marco de que, además, en una de las audiencias de la semana pasada, una familiar de un compañero desaparecido fue echada de la sala de audiencias por el Tribunal, porqué les gritó ¡asesinos! a estos genocidas.

El presidente del Tribunal- Díaz Gavier- amenaza permanentemente con desalojar la audiencia si hay expresiones de este tipo por parte del público. Mientras, los genocidas se hallan protegidos por un blindex, sin esposas y cuentan con la libertad para decir lo que se les antoje! Además, ninguno de ellos se encuentra en cárcel común!!

Desde el Ce.Pro.D.H estamos participando de las audiencias y creemos que esta situación, en la cual se expone a los testigos al yugo de sus verdugos, en el marco del amedrentamiento que significa la desaparición, hace ya 20 meses del compañero Jorge Julio López, es consecuencia de esta política de impunidad, promovida por el mismo gobierno y aplicada por la justicia, en la que se ha hecho un enorme desmembramiento de las causas.

Que sea necesario someter a los testigos a que relaten minuciosamente lo que ocurrió, que haya que probar hecho por hecho -juzgándolos por un par de casos aislados- es consecuencia de que no se los juzgue por CCD, y por lo que realmente ocurrió, que fue un plan sistemático articulado por el Estado para exterminar a todo un sector de la sociedad, ¡un genocidio! Ello es parte de la política kirchnerista de zanjar un nuevo punto final, condenando a un par de genocidas para que quede el resto absolutamente impune.

Por todo esto vemos más que necesario redoblar la movilización, con los trabajadores, los estudiantes, los organismos de derechos humanos, para que se deje de hostigar a los testigos!, para que se los juzgue por genocidio! Y para que vayan a una cárcel común!.