Una vez más, como en el caso del joven Rubén Carballo en el recital del grupo Viejas Locas, el brutal accionar de la Policía Federal se cobró la vida de una persona, esta vez la de Ramón Aramayo, de 36 años, ferozmente golpeado al ingreso del partido que debían disputar Vélez Sarsfield y San Lorenzo de Almagro.

Desde el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos de la Zona Sur repudiamos este crimen y exigimos juicio y castigo para los responsables directos y el jefe del operativo, al mismo tiempo que nos solidarizamos y ponemos a disposición de los familiares y amigos de Ramón Aramayo.

Según Carla Lacorte, víctima del gatillo fácil policial e integrante del CeProDH, “Se trata de la misma comisaría de la que salieron los policías que mataron a Rubén Carballo y es la misma Policía Federal que mató a los asentados del Parque Indoamericano y fue cómplice del crimen de Mariano Ferreyra. Vemos que el gatillo fácil y la represión no son patrimonio de la Bonaerense y las otras policías provinciales. Queda claro también que la federal y la Bonaerense son irreformables y su accionar criminal no va a cambiar con la conducción de civiles como asegura la ministra Garré quien, por tener a su cargo la cartera de seguridad, es también responsable de lo ocurrido”.

Llamamos a movilizarnos por justicia en el caso Aramayo y a marchar contra el gatillo fácil, los procesamientos a los luchadores obreros y populares y el castigo a los genocidas de la dictadura el próximo 24 de marzo con la Coordinadora Antirrepresiva Sur y el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia.

Centro de Profesionales por los Derechos Humanos-Zona Sur